Empecemos definiendo que es un Bitcoin
Una vez entendemos que la tecnología blockchain se basa en criptoeconomia, que necesita de mecanismos y motivaciones económicas (teoría de juegos) para funcionar y que lo anterior tiene el potencial de cambiar la manera en la que las empresas generan valor al consumidor; veamos el surgimiento del Bitcoin y las demás criptomonedas.
En pocas palabras, Bitcoin es una moneda digital.
No hay facturas para imprimir o monedas para acuñar. Está descentralizado: no hay gobierno, institución (como un banco) u otra autoridad que lo controle. Los dueños son anónimos; en lugar de usar nombres, identificaciones de impuestos o números de seguridad social, Bitcoin conecta a compradores y vendedores a través de claves de cifrado. Y no se emite de arriba hacia abajo como la moneda tradicional; más bien, Bitcoin es “minado” por poderosas computadoras conectadas a internet que cualquier usuario puede adquirir.
El valor de un Bitcoin está determinado por lo que las personas pagarán por él.
De esta manera, hay una similitud con el precio de las acciones.
El protocolo establecido por Satoshi Nakamoto establece que solo se pueden extraer minado 21 millones de Bitcoins. Hasta ahora se han extraido cerca de 12 millones por lo que hay un suministro limitado, como el oro y otros metales preciosos, pero no tiene un valor intrínseco real.
Esto hace que Bitcoin sea diferente de las acciones, que generalmente tienen alguna relación con las ganancias actuales o potenciales de una empresa.
Sin un gobierno o una autoridad central a la cabeza controlando la oferta, el “valor” está totalmente abierto a la interpretación. Este proceso de “descubrimiento de precios”, es el principal impulsor de la volatilidad en el precio de Bitcoin; invitando a la especulación y la manipulación.
No es recomendable en absoluto invertir en Bitcoin cantidades que no podamos permitirnos perder.
Mas allá del Bitcoin: ¿Hay más criptomonedas?
A menos que seas nuevo en la industria, ya sabes que hay más de 1.500 criptomonedas. Sin embargo, no todas ellas tienen la misma función o naturaleza.
Vamos intentar explicar los distintos tipos que existen y sus principales exponentes, aclarandoos de antemano, que no existe una nomenclatura clara sobre los distintos tipos de criptomonedas actuales. Por lo tanto, es posible que en otros artículos lo encuentres con diferentes nombres e incluso diferentes maneras de dividir las criptomonedas.
A grandes rasgos, cada criptomoneda puede ser definidas como monedas o como tokens.
¿Qué es una moneda?
Una moneda o coin es esencialmente un activo financiero que se puede usar como una moneda tradicional. Es decir, como un medio de cambio o una reserva de valor. Las monedas tienen su propia cadena de bloques y operan independientemente una de la otra.
Por ejemplo, Bitcoin es excepcionalmente diferente de cualquier otra criptomoneda.
Por tanto, el objetivo de las monedas digitales es el de usarse como manera de transacción alternativa a los dólares o a los euros. Varios países han comenzado ya a estudiar la posibilidad de emitir una moneda digital oficial y pronto, puede que cada moneda fiduciaria se convierta en una criptomoneda.
Las monedas digitales necesitan de las tres características atribuibles a las monedas (reserva de valor, unidad de medida, instrumento de cambio).
¿Qué es un token?
Los tokens son una representación digital de cualquier activo emitido por un dApp (aplicación descentralizada).
A diferencia de las monedas, no es necesario construir una cadena de bloques ad hoc. Para entender la diferencia fundamental entre monedas y tokens, debemos entender inevitablemente cómo funciona y qué es Ethereum. Y no, Ethereum no es una moneda.
En 2014, algunos programadores bajo la guía del desarrollador ruso-canadiense Vitalik Buterin lanzaron el proyecto Ethereum. Una plataforma de código abierto construido sobre blockchain que, gracias a la escritura de contratos inteligentes hace posible el desarrollo de DAOs (Organizaciones autónomas descentralizadas), de Dapps y el lanzamiento de ICOS (Oferta de Moneda Inicial).
Como todas las blockchains, Ethereum también necesita un incentivo económico (teoría de juegos) para funcionar y en su caso, se les paga a los mineros a través de una criptomoneda llamada Ether (ETH). Por lo tanto, la criptomoneda Ether no es más que el token que permite que la red Ethereum exista y funcione.
Tipos diferentes de tokens
Los tokens también se suelen dividir generalmente en dos clases y son clasificadas en una u otra dependiendo de lo que representan en la cadena de bloques.
- Equity tokens: representan acciones de un negocio. Como la deuda o las acciones de una compañía tradicional. Al emplear tecnología de cadena de bloques y contratos inteligentes, una startup podría renunciar a una oferta pública inicial (IPO) tradicional para financiarse y en su lugar realizar una ICO. Una ICO o una Oferta de Moneda Inicial, no es más que una promesa, posible a través de contratos inteligentes, de devolver el capital recaudado a través de tokens. Es decir, es una forma en la que una nueva empresa puede recibir financiación a través de la emisión de su propio token.
- Utility tokens: son básicamente los emitidos para permitir a los usuarios realizar transacciones en una blockchain, intercambiar tokens o acceder a productos y servicios. No se consideran inversiones y por lo tanto, no están expuestas al escrutinio reglamentario. Los Ether entran dentro de esta clase.
¿Qué aspectos técnicos diferencian a Bitcoin y Ethereum?
Si bien Bitcoin y Ethereum funcionan sobre tecnología blockchain, los dos difieren en aspectos técnicos.
Mientras que Bitcoin se crea como una alternativa al dinero regular y es, por lo tanto, un medio de transacción de pago y depósito de valor, Ethereum se desarrolla como una plataforma que facilita los contratos y las aplicaciones peer-to-peer a través de su propio vehículo de divisas.
Aunque, Bitcoin y Ether son ambas monedas digitales, el objetivo principal de Ether no es establecerse como una alternativa de pago (a diferencia de Bitcoin) sino para facilitar y monetizar el funcionamiento de Ethereum para permitir a los desarrolladores construir y ejecutar aplicaciones distribuidas.
Resumen
Después de leer los dos artículos, entenderemos mejor:
- Cómo el uso de criptomonedas o criptodivisas se basa en los principios de la criptoeconomía.
- La relación de las criptomonedas con la tecnología blockchain.
- La forma en que las criptomonedas proporcionan a los usuarios un incentivo económico para usar sistemas descentralizados P2P.
- Cómo la teoría de juegos ayuda a mantener de forma honesta un sistema descentralizado.
- Cómo se determina el valor de Bitcoin.
- La diferencia entre monedas o coins, y tokens.
En las siguientes entradas sobre criptomonedas y blockchain profundizaremos y explicaremos detalladamente algunos conceptos introducidos en esta entrada, y analizaremos las criptomonedas más importantes del momento.