Las opciones de almacenamiento por niveles está aumentando a un ritmo exponencial, aunque las capacidades de los sistemas de almacenamiento varían mucho, tanto como el propósito que decidamos conseguir con ese almacenamiento.
El primer paso que dar es identificar los objetivos, las razones o los problemas que necesitas resolver antes comenzar a evaluar el sistema de almacenamiento.
Estos dispositivos o plataformas conectadas son vitales en cualquier empresa, pero la mayoría de veces no se les da la importancia necesaria. Actualmente, los sistemas locales basados en discos duros siguen siendo los dispositivos de almacenamiento más utilizados.
En la actualidad, todas las empresas generan una gran cantidad de datos informáticos (facturas, contratos, albaranes, documentos técnicos y legales…) que necesitan ser guardados en sistemas seguros y rápidos. No todos los archivos que guardamos tienen la misma importancia ni necesitamos acceder a ellos con la misma rapidez, por ello es importante organizar un plan de almacenamiento eficiente, el cual nos ayudará a mantener nuestros datos a salvo, organizados, centralizados (o no) y con un correcto acceso a ellos reduciendo el coste económico al usar nuevas soluciones como el almacenamiento en la nube.
En Grupo Garatu tenemos un amplio conocimiento sobre estas técnicas, te informamos de las más conocidas y recomendadas.
Tipos de almacenamiento
No podemos comenzar a hablar sobre planes de almacenamiento para empresas sin antes tener, al menos, una noción básica sobre los diferentes tipos de almacenamiento que tenemos disponibles en el mercado.
Actualmente, podemos basar la infraestructura de almacenamiento de datos en muchos dispositivos, complejos sistemas y nuevas soluciones en la nube como Garatu Cloud que están apareciendo con el uso de Internet para las empresas actualizadas y modernas.
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Aunque no necesitamos meternos en mucho tecnicismo, repasamos brevemente las principales arquitecturas de almacenamiento:
- DAS (Direct Attached Storage): Se trata de la conexión directa del dispositivo de almacenamiento a la máquina, como podría ser un disco duro convencional, rack con una cabina de discos o unidades cinta. Los dispositivos DAS utilizan conectores convencionales como SATA o SCSI y canal de fibra (FC). Podríamos decir que nuestro ordenador utiliza un sistema DAS de almacenamiento.
- Inconveniente: Dificultad en la gestión de los discos (podríamos tener miles conectados), baja tolerancia a fallos si no existen sistemas RAID complejos.
- NAS (Network Attached Storage): Parecido a los sistemas DAS pero la conexión entre la máquina y el sistema se realiza a través de cable de red o fibra óptica utilizando el protocolo TCP/IP o entornos como SMB, CIFS, FTP… Por lo tanto, es parecido a DAS, con la diferencia que podemos estar más separados del sistema de almacenamiento y transmitir datos más rápidamente a través de fibra óptica o cables de red de 10 Gbps.
- Inconveniente: Podemos alcanzar rápidamente el límite máximo de velocidad de la red y crear un importante cuello de botella si no utilizamos las últimas tecnologías, la cuales suelen tener un alto coste.
- SAN (Storage Area Network): Es una infraestructura dedicada y de alto rendimiento para la transmisión y almacenamiento de datos. Está optimizada para almacenar y mover grandes cantidades de información y generalmente está repartida en varios puntos con una gran distancia entre sí. Las redes SAN están siendo muy utilizadas últimamente por su velocidad, escalabilidad y redundancia. Se pueden basar en Gigabit Ethernet o GigaEthernet como iSCSI, y también se pueden añadir otros elementos como múltiples switches para ofrecer una muy alta disponibilidad.
- Inconveniente: Coste económico muy elevado, necesidad de grandes conocimientos técnicos y gran infraestructura.
Existen muchos más tipos, como iSCSI, que también se basa en DAS pero basándose en enlaces ethernet convencionales para intercomunicar los sistemas.
Dejando a un lado tanto dato técnico, está claro que la mayoría de infraestructuras de almacenamientos tienen algún que otro inconveniente. Si es rápido y de alta disponibilidad, su coste es muy elevado, pero si es económico, puede no ser suficiente para nuestra empresa. ¿Entonces? ¡Menudo lío!
Almacenamiento en la nube
El almacenamiento online es una solución a todos los problemas generados por los sistemas de almacenamiento convencionales. Podríamos decir que es la unión de todos ellos y que une lo mejor de cada uno. Existen diferentes tipos de almacenamiento en la nube, pudiendo ser 100% online, o híbrida, teniendo sistemas en la nube y sistemas locales.
Sistemas locales (convencionales)
Los sistemas locales son los que hemos utilizado toda la vida: servidores con cabinas de discos duros, sistemas NAS en la oficina, RAID locales, etc. Estos sistemas que a priori podrían parecer los más rápidos y seguros, son lo contrario a lo que parecen. No es un sistema centralizado (perderemos eficiencia al tardar en buscar y encontrar datos), fácilmente se pueden estropear, necesitan mantenimiento y tener una infraestructura local decente tiene un coste económico elevado.
Sistemas híbridos (locales + cloud)
Los sistemas híbridos son una solución intermedia entre los sistemas convencionales y las nuevas infraestructuras basadas completamente en la nube. Una parte está en la nube y otra en local, de esta manera, si nuestra empresa sufre un corte en la red, podemos acceder a los datos en local (replicados en la nube) y si sufrimos un apagón eléctrico, podemos acceder a los archivos en la nube desde redes 3G, por ejemplo. Probablemente es el sistema más caro, pues necesitaremos una administración de ambos sistemas para que estén sincronizados y tenemos que invertir en los sistemas locales.
Sistemas 100% cloud
La solución preferida de las empresas modernas es, sin duda, basar su infraestructura de almacenamiento completamente en la nube. No debemos de pensar en los sistemas de almacenamiento online como un disco duro virtual, no es lo mismo. Un sistema de almacenamiento la nube para empresas es una compleja infraestructura que todo está conectado entre sí, consiguiendo una velocidad de acceso a los datos inmejorable y una disponibilidad que roza el 100%.
Lo que hay que plantearse como mínimo es hacer el backup de todos los archivos críticos de tu empresa. Más vale prevenir que llorar. Si quieres puedes ver nuestros diferentes planes aquí.
Las empresas que confían en infraestructura en la nube o en la nueva almacenamiento de datos en cloud, también conocido como StaaS:
1. Drástica reducción de costes: con el modelo pago por uso se consigue disminuir el coste del almacenamiento.
2. Respuesta muy rápida: el acceso a los datos sólo está limitado por la velocidad de nuestra red, que, generalmente, en una empresa suele ser muy rápida.
3. Alta escalabilidad: rápidamente podemos conectar nuevos servicios o moldear el servicio en la nube a otro servicio o plataforma, añadir nuevas características o cambiar el tipo de almacenamiento con 1 clic.
4. Seguridad absoluta: en contra de lo que alguna gente piensa, los datos en la nube están en un entorno muy seguro, completamente privado, cifrado y redundado muchas veces.
5. Cumplimiento de leyes de protección de datos: en los sistemas en la nube es fácil cumplir con las leyes españolas de protección de datos.
6. Acceso desde cualquier terminal: desde un ordenador en la oficina hasta con una Tablet en un restaurante podemos acceder a todos nuestros datos.
7. Facilidad de uso y acceso: accederás a los datos como prefieras, existen muchos métodos. Además, se pueden establecer diferentes grupos de accesos y permisos a los datos, de esta manera cada empleado puede tener acceso a unos datos en concreto.
Tu oficina está en donde tu te encuentres, si trabajas directamente en la Nube
Actualmente, muchos usuarios utilizan, de manera particular, soluciones de almacenamiento online de grandes empresas, como Google Drive, OneDrive o Dropbox. Existe la idea, incorrecta, fundamentada por ese tipo de almacenamiento, que el almacenamiento online requiere una sincronización con nuestro ordenador o sistema. Incorrecto.
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Aunque podemos sincronizar los archivos en la nube y en nuestro ordenador -creando un sistema híbrido propio- lo ideal sería trabajar directamente en la nube. De esta manera, todo estará guardado en tiempo real, no se crearán problemas de sincronización y es mucho más cómodo de utilizar para nunca perder información. Además si eres usuario de estas plataformas gratuitas, estaría bien que te fijaras que tipo de seguridad de tus datos están dispuestos a brindarnos, o que tipo de servicio técnico te ofrecen para no tener un susto nunca
Almacenamiento en función de las necesidades particulares
Si nunca te habías interesado por los sistemas de almacenamiento, es posible que hayas recibido demasiada información técnica de golpe y puedas estar un poco confuso. Es importante que tengas en cuenta que cada empresa tiene sus propias necesidades según la capacidad y acceso (velocidad) necesaria, pero por lo general, el almacenamiento en la nube es la mejor elección en cuanto a precio/almacenamiento/velocidad.
Para una pequeña PYME con poca información, un sistema NAS convencional podría ser suficiente.
Para una empresa mediana con, por ejemplo, 50 TB de información, un sistema local de NAS podría ser suficiente.
Para una empresa grande con más de 100 TB de datos un sistema SAN es correcto. Pero si realmente queremos modernizar los sistemas de almacenamiento de nuestra empresa, necesitamos una infraestructura basada en la nube.
Tanto si somos una pequeña PYME como si somos una gran empresa, el almacenamiento en la nube es un acierto en todos los sentidos, pues nos ayuda a centralizar los datos, reducir costes, aumentar la eficiencia del acceso a los datos, mantener la integridad y olvidarse de administración de sistemas locales.
En el Grupo Garatu estamos convencidos de que el almacenamiento en la nube es una gran solución para tu empresa como ya lo es para muchas otras. Si estás interesado, ¡te ayudamos encantados! Somos expertos en sistemas cloud privados, públicos e híbridos, así como en sistemas de almacenamiento local si las circunstancias lo requieren, ¡estaremos encantados de echarte un cable! 😉